Nuwa Waimaku de Natalia Revilla construye un amalgama de narrativas en las que se entrecruzan la esfera social y la imaginación individual con las complejidades del lenguaje. La nueva exposición individual de la artista peruana es presentada en la embajada de Perú en Washington DC gracias a RoFa Projects.
Natalia Revilla, artista interdisciplinaria basada en Lima, se sumerge en la intersección entre diferentes lenguajes, explorando las palabras únicas que disuelven cualquier posibilidad de referencia en el mundo de nuestra experiencia hablada. En sus obras, Revilla presenta términos singulares que, aunque carecen de referencia directa, contienen sabiduría y significado profundos, como lo expresó Walter Benjamin al referirse al "lado épico de la verdad". Más allá de eso, su trabajo también reflexiona sobre el poder y el papel de las mujeres.
A través de su arte, Revilla profundiza en las complejidades de la comunicación al estudiar a los pueblos indígenas del Perú. Se preocupa por los paradigmas occidentales que condicionan la interacción con la naturaleza a través de relaciones sociales, políticas y jerarquías de poder. Su enfoque crítico revela las ambigüedades y vacíos en la comunicación, destacando la importancia de comprender las perspectivas indígenas y desafiar los sistemas dominantes de conocimiento.
Estas ideas y reflexiones están presentes en la exposición "Nuwa Waimaku: El poder de las palabras", curada por Gabriela Rosso, directora de RoFa Projects. En esta muestra, Revilla invita a reflexionar sobre la relación entre el lenguaje, la cultura y el poder, especialmente en el contexto de la lucha de las mujeres indígenas por el reconocimiento y la preservación de sus territorios y comunidades.
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