Por Israel Tolentino
La xilografía y muchas técnicas de las artes gráficas, desde hace mucho, han superado sus limitaciones, ahora risibles: el formato de la matriz limitado a obras pequeñas, la falta de papel para las impresiones; la humedad de Lima que no ayuda a mantener el papel y, otras disparejas y centralizados alegatos. Para el público que sigue creyendo que solo el óleo es arte, tiene para sus ojos, en las paredes del espacio Fugaz del Monumental Callao, la fuerza del grabado de Gloria Quispe Tinco (Lima, 1990).
Gráfica Errante, proyecto que reúne un conjunto significativo de la producción de la artista en la sala 113, reflexiones nacidas en esta casa llamada Perú, donde cuando algo no va bien, como sucede hoy, nos reencontramos en las calles o espacios como Fugaz.
Conocí a Gloria gracias al artista Luchito Torres, cuando realizamos la co-curaduría de la exposición “Grabado en gran formato” iniciado junto al crítico de arte Juan Peralta y luego por esas cosas recurrentes en el país, con la indulgencia de Juan, tuvimos que tomar la posta, continuar el proyecto.
Elegir las técnicas manuales del grabado para encontrar un discurso que no traicione la llama interior, Gloria Quispe tenía dos referentes poderosos: Luis Antonio Torres Villar (1983) y Martín Moratillo (1968), artistas de obra intensa y quienes habían logrado trabajar formatos inmensos para el medio, encontrar los materiales necesarios o inventarlos, domar así miedos arrastrados en torno a la gráfica.
Gloria tiene un nombre de pura voluntad, lleva en cada letra lucidez, coraje y trabajo; cuando sus coetáneos sentían que todo estaba hecho y había que seguir dándole vueltas a lo de siempre, ella inquieta, dudaba de esa comodidad; buscó una experiencia que marcara su devenir, encontró esa posibilidad en México, exactamente en Oaxaca. Postuló para una residencia en el Taller Artístico Comunitario (TAC) donde encontraría el lugar para encausar los nervios y su punche creativos con el apoyo del maestro Mario Guzmán. En ese viaje se encontró de lleno en un espacio reivindicado por el maestro Francisco Toledo (1940 – 2019), en Oaxaca halló más de 50 talleres de gráfica y sobre todo la mística que inquiría para su accionar artístico. Ese viaje le confirmó que nada es imposible.
En Oaxaca, Gloria vivirá un periodo intenso de su libertad creativa, donde el sudor provocado usando las herramientas e instrumentos gráficos en las muchas horas de labor sacarán de ella respuestas que incubaba desde su época estudiantil. El grabado mural o grabado muralista, como se llama en México al grabado en gran formato, tomará su obra. La artista encuentra en la acción de grabar “expulsar sus conflictos” son sus palabras y uno se pregunta ¿en el país quien no tiene aprietos? Gloria, encontró en su trabajo corporal paliar esa lucha donde el final, es como salir del túnel y encontrar como luz una impresión enjaulando una respuesta; sabe que resistir en estos días, digo días, pues hablar de mucho tiempo es jugar con los vaticinios, no hay mayor pretensión que creer que se pueda planear algo para dentro de cinco años, entre nosotros el mañana en arte es tan incierto como el hoy. Un ejemplo claro de esto está inscrito en la obra Inti, nombre del joven asesinato junto a Bryan. Muertes que valieron para poner fin a un gobierno ilegal que no alcanzó siete días.
Gloría plantea la idea de la errancia desde la concepción de dos obras de su primera individual tituladas: Exogénesis I y II, dos obras gigantescas, donde cada personaje es de tamaño natural, ellas ilustran la teoría de que la vida llegó de otro lado; un pie y una mano nos arrojan a este planeta ¿a las buenas o a las malas? henos acá. Obras concebidas en Oaxaca, en el taller TAC el año 2018.
El retrato de Inti, el joven estudiante asesinado deja esta pregunta: ¿Será esa la manera de emprender el viaje al otro confín? Gloria Quispe Tinco es artista y madre que no duda en salir a las calles para que en un tiempo no muy lejano, Micaela su hija, no tenga que hacerlo, ella intenta una respuesta con su obra… Una lucha perdurable con un término que no se asoma por ninguna calle (Lima, agosto 2023).
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